¡EN QUÉ LÍO ME HE METIDO!

Por Alicia Lázuli
Estoy aterrorizada. Me siento como si alguien me hubiera empujado al centro del escenario de un teatro lleno de espectadores sin haber siquiera leído el guión. Pero ¿en qué lío me he metido? Con lo tranquila que yo estaba acudiendo a mis terapias los martes y los jueves tuve que tropezarme con el puto taxista aquel: “No pierdas el tiempo llorando en los asientos de los taxis y de los psicoanalistas. La vida es una caja llena de hilos”. LA VIDA ES UNA CAJA LLENA DE HILOS. Sonó tan rotundo y me pilló tan desprevenida... Fue como la mañana en que entró en la cafetería aquel hombre alto, demasiado bien peinado, con un abrigo impecable de color ocre y, sin parpadear, dijo mirándome a los ojos: DEME DINERO. Yo abrí la registradora y le di un billete de diez euros. El hombre bien peinado metió el billete en su bolsillo y se marchó. Jacinto, el primer cliente del día, que en aquel momento tomaba un café, no dijo ni media palabra. Terminó su café, dejó, como siempre, un euro en la barra y salió después de desear, también como siempre, buenos días a los seres que habitan la nada, porque nunca se dirige a mí, siempre lanza al aire sus “buenos días” mientras camina hacia la puerta. Tardé unos minutos en reaccionar, que no en comprender, porque comprender todavía no he comprendido. Saqué de mi bolso diez euros y los puse en la registradora ¿Qué podía hacer? ¿Cómo iba a explicarle a Luis, mi jefe, lo que había ocurrido? ¿Qué podía decirle? ¿Que me habían atracado? Me pediría detalles y no podía explicar que había sido atracada por el procedimiento de la determinación sin titubeos... seguramente pensaría que era gilipollas y no titubearía al despedirme a continuación. En fin, que aquí estoy, como aquella mañana junto a la registradora del bar después de desaparecer el hombre bien peinado del abrigo ocre, en el escenario de La caja de los hilos, sin comprender cómo he podido hacer caso a un taxista pirado que, para más inri, lleva una pistola en la guantera.
Aya Kato nos presenta en este post su sugerente versión de "Alicia en el país de las maravillas", de Lewis Carroll.
Hoy el cuerpo nos pide escuchar a los Beatles...
6 comentarios
Esedeahí -
La caja de hilos -
Nascu: Si la mirada quedó en tu retina, es que fue importante. Gózala.
Beadever: La Caja se llena de saltos y otras gracias)sobre todo cuando nos visitas tú. Besos saltarines.
Elbrús: lo de follar habrá que preguntárselo a Alicia. Lo del desnudo está en fase de negociaciones. Gracias por tu comentario.
elBrús -
(Espero que seas una piva de verdad y no una de esas con sorpresa que aveces se encuentra Coleguita)
Entre esa Hadita cojonera, Cuca la mal follada y esa pandilla de maromos salidos que somos todos los demás, esta caja empezaba a oler a polla rancia.
Alicia, me han dicho que estas bastante buena y que follar, te encanta. Si se folla bien supongo.
¿Para cuando un desnudo a la audiencia?
¡ALICIA DESNUDATE!
beadever -
nascu -
una gitana rumana que andaba pidiendo por la calle en un pueblo de cuyo nombre no puedo acordarme, se acercó con esa cara que como si fuese una máscara barata de los chinos la llevan todas cuando se ponen en faena, me miró intuyo un gesto de duda en mi rostro , y no lo dudo ni un momento, se hechó a mis pies implorándome que le diese algo, por un momento senti tanto pudor, tanta verguenza de ver a esa mujer como me besaba los pies que rapidamente sin tituvear ni un segundo Heché mano de mi monedero y saqué el primer billete que pillé, si hubiese sido de 100 euros tambien se lo hubiese dado, lo peor fue ver como se levantó y me dirigió esa mirada de triunfo y de pena al mismo tiempo, manda huevos, ah! si tengo foto de esa mujer y de esa mirada ,quedó grabado en mi retina...
Penélope -