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La caja de los hilos

El saloncito de Cuca

EL ADIÓS DE UNA MUJER ROTA

Por Cuca Guillén

Bueno, he decidido retornar por estos lares porque, oyes, una fue a Sansueña, tiene una educación y se despide siempre como Dios manda. Pues eso, que hace tiempo que ya no escribía porque advertí que este blog era un nido de psicópatas y pervertidos. Que La Caja es otra cosa, me decían, que aquí se admite a todo el mundo, piense lo que piense, que son todos supermajos, supernormales, cristianos de guitarra y parroquia, be happy, be free... ¡Patrañas! Una panda de rojos separatistas ateos y homosexuales es lo que son todos estos de La Caja de los Hilos, unos ignorantes que no saben ni combinar un Dior. Si ya lo sé, cómo os reíais a mis espaldas, y me poníais fotos cochinas en mis artículos, y me llamabais loca, y facha, y guarra... ¡Y eso sí que no! Que una es una y sale siempre de casa con el botox y la faja puesta por lo que pueda pasar.

A lo que iba, después de año y medio sin escribir nada (ya eran demasiadas las ofensas a una que es una santa y al Señor Todopoderoso), he decidido volver porque Cuca Guillén no se va por la puerta de atrás, como el Zapatitos ese. Se va por la principal, como se marchó en su día don José María Aznar, que buena falta nos haría para sacar a patadas a esta orda de pepiños y pajines que van a arruinar España. Durante año y medio he permanecido en silencio, en la casa de Pitusa en Mónaco, a base de trankimazines, tratando de olvidar el devenir de esta tierra nuestra, tratando de olvidar a un marido gilipollas que después de votar al PSOE se fugó con Mari Cielo, una de las perracas de la Peñaza, la mujer de su socio, que la vieron el otro día comprando tangas en el Corte Inglés... Oyes, que menuda ordinariez, todo sea dicho.

Ains, que me vuelvo a perder, oyes. Pues eso, que ahora que España vuelve a recobrar el oremus, que se ha dado cuenta de que esta nuestra nación se va a ir al carajo por culpa de estos sociatas, que los del PP les vamos a dar una tunda en las urnas (pese a que la Rudi esa no quisiera ofrecerme la mísera candidatura al Ayuntamiento, con lo mona que soy yo y el verbo que tengo)... Ya se me ha vuelto a ir el hilo, oyes. Ya está. Que ahora que los buenos resurgen, como Cristo resucitó al tercer día, he decidido decir las cosas bien claritas a esta panda de rojeras indocumentados, toxicómanos y mariquitas que gestionan este blog. Y lo diré con mayúsculas, para que se entienda: ¡¡¡ME VOY!!!

Y me voy como entré: digna, como una reina, con el pelo bien cardado y sin soltar una lágrima, porque la gente de bien no llora, y menos por aquellos que no saben tratar a una dama como se merece, porque al mal gusto, buena cara, y al pan, pan y al vino, vino. Y me voy para no volver, que desde que entré a este blog todo han sido desgracias: ganó el Zapatero, Aznar se lió con una pelandusca y se me estropearon los manolos en esa Expo de vulgares y de pobres, que me tuve que comprar media docena para recuperarme del sofocón. Y encima se me aguachinó un Dolce Gabanna en un botellón de panolis vestidos de blanco. ¡Hasta me metió mano un taxista y se me puso a blasfemar el cura de Santa Engracia poseído por el mismísimo demonio!! Del soponcio que me dio aún hoy me sacan los cuartos los psicoterapeutas, confesores y mi cirujano plástico.

Lo dicho, que una que es una señora se va, con la cara tan alta como la mamoplastia, pero eso sí, con la pena de no haber convertido esta caja en un lugar decente. A pesar de lo dicho, me marcho sin un ápice de rencor, oyes. Bueno, un poco de rencor sí que me llevo encima, la verdad. Así que agarraos los machos porque lo vais a lamentar: en cuanto ganen los nuestros, vamos a intervenir La Caja de los Hilos, como con Grecia, y con cuatro chavalotes del Opus Dei sobrinos de mi concuñada, dejaremos este blog como una patena. Aquí sólo se va a publicar el horario de misa. ¡Y si no, cerrojazo, y aquí paz y después gloria! Hala, que ya vale, que me tomo una analgilasa y me voy a Escada a comprar un conjunto, que tanto recordar los sofocos que me han hecho pasar estos esgarramantas, me va a dar el telele. Y eso sí que no, que las desgracias han hecho de mí una mujer rota por dentro y por fuera, pero eso no tiene nada que ver con ir divina de la muerte. A ver si os vais a pensar que a estas alturas voy a llamar la atención. Oyes.

La mujer rota que ilustra este artículo es obra del fotógrafo brasileño Bruno Cals.

Rompe...

The Clash - London Calling.mp3

The Clash - White Riot.mp3

The Clash - Should I Stay Or Should I Go.mp3

CENA EN BLANCO

Por Cuca Guillén

Cuando me lo dijo Paquito, me quedé ‘astonished’, oyes. “I don’t relieve it, Paquito”. “Que sí, tía, que he invitado a las más fashion de la peluquería y tú no me podías faltar, darling”, me dijo. “Pero, ¿no habrás avisado a las perracas de la Peñaza, no?”, le pregunté yo. “Que no, mi amor, que solo estará lo más granado, todas amigas mías, modernas, ya sabes... Bueno, como tienes chacha, tú te encargas de la comida. Que no falte el caviar, mi amor…”, me contestó. Cuando se lo comenté a Pitusa, casi me da un bofetón. “¿Qué te vas a una fiesta con gente toda vestida de blanco, a un parque, en plan botellón clandestino, como los pobres?”, me gritó. “No te enteras, Pitusina, que esto es lo más ‘chic”, le respondí buscando la puerta. En cuanto me quité a Pitusa de encima, me compré un Dolce Gabbana blanco por eso de ser transgresora y me empecé a pintar como una loca, no fuera que se notara que me salté mi última sesión de bótox.
    Me pasé por la pelu y me cogí a Paquito del brazo, que el chófer, que se llama Roberto y tiene unos m
úsculos que te dejan tiesa, estaba en la puerta. Por no llamar la atención, solo pillamos ostras, caviar, un poco de ’foie’ y media docena de botellas de Dom Perignon. Al llegar al Parque Grande, me quedé muerta. Antorchas junto a la fuente de Neptuno, flores a tutiplén, cristalería fina, cubertería de plata, un cuarteto de cuerda y la multitud vestida de blanco. Era hasta sexy, oyes. El chófer nos preparó el mantel y fue colocando las cosas, mientras Paquito y yo fichábamos al personal. Eran todos, o casi todos, tan ideales que solo me faltaba José María Aznar, por eso del glamur. “Mira, Paquito, esa guarrona se ha traído un Dior y se le ven todas las tetas…”, le comenté a Paquito, que andaba mirándole el trasero a un jovencito vestido de ibicenco. “Ains, Paquito, siempre pensando en lo mismo…”, le dije. Mi estilista no perdía comba: "Mira, por allí está Helena Santolaya, la Cuartito... ¿Y esos niños tan monos? Ese de las gafitas me trae loca... Por acá está el Pepe Cerdá, y Gabi Añaños, y Yago de Mateo, y esa de la tele...".
   
Hecho el repaso, empezamos a cenar (las loros que había traído Paquito, tan jovencitas ellas, no abrían la boca más que para chupar ostras, las muy buitres). En estas que escucho a mi espalda: “Pásame el sushi…”. “¿El sushi? ¿Ves Paquito? Ya te dije yo que teníamos que haber traído sushi. Vamos a quedar como dos catetas”, le gruñí mientras el muy impresentable se zampaba el caviar de beluga como quien se mete una fabada. Bueno, prosigo. Cuando todo parecía ideal de la muerte  (los adolescentes de las litronas se mantenían a una distancia prudencial no fuera a ser que se encontraran a sus padres), me cayó una gota en mi nariz recién operada, oyes. "Coño, Paquito, que está lloviendo", avisé. Paquito ni se inmutaba entre las ostras y el ’foie’. En dos minutos, se presentó allí la de Dios es Cristo. "¡¡¡Paquito, trinca el caviar!!!". Y el peluquero maricón como si oyera llover, nunca mejor dicho.
    No pod
ía aguantar semejante estropicio, así que salí de debajo del árbol y me lancé a tapar los platos. Craso error. Tenía que haber mandado a Roberto. El tacón de mi manolo se me clavó en la hierba y ya os imaginaréis lo que pasó. Me di semejante sopapo que el caviar dio tal salto que aún lo están buscando. El Dolce Gabanna, para tirar, los manolos, ídem de ídem, las ostras, hechas sopa... ¡¡¡Y las amigas de Paquito partidas de risa mientras se fumaban no sé qué!!! Ultrajada, humillada, mojada, de barro hasta las cejas y de indignación hasta las orejas, no pude más. "¡¡¡Roberto, el coche!!! ¡¡¡Nos vamos!!!", grité como solo una gran dama sabe hacerlo. "Pero, chica, que no pasa nada -me dijo Paquito- no te vayas, mi vida, que va a pinchar la Cuartito..."". "Ni Cuartito ni gaitas". Y me fui a casa como alma que lleva el diablo, Dios me perdone. Menos mal que estaba Roberto, que si no...

El pasado 3 de junio se organizó una cena en blanco en el Parque Grande, al estilo parisino. Para ilustrar la crónica de lo que allí le ocurrió a Cuca, hemos escogido una fotografía de la alemana Claudia Rogge, siempre tan fascinante. 

De blanco...

Procol Harum - A Whiter Shade Of Pale.mp3

Dan Reeder - A Whiter Shade Of Pale.mp3

Annie Lennox - A Whiter Shade Of Pale.mp3

Alton Ellis - A Whiter Shade Of Pale.mp3

LA RUBIA

Por Cuca Guillén

Hacía días que quería hablar de esto, pero la verdad, oyes, que no he tenido ni un rato porque una tiene sus compromisos y sus quehaceres y para qué os voy a contar. Ahora, con las rebajas, estoy mucho más liberada porque como no hay que ir de tiendas a mezclarse con la chusma y con los pobres, le puedo dedicar más tiempo a poner el dedo en la llaga de los asuntos pendientes. A lo que iba, que me lío, que quería hablaros de cómo me está dejando el partido la Rudi. Mira que yo vi su llegada como el advenimiento de la Virgen María. Ese porte, ese aquí mando yo, esas faldas ajustadas a la faja, ese pelo a lo Jackie Kennedy, ese estilazo de mujer fatal... Bueno, lo admito, se me está yendo la pinza, es verdad, un poco fondona si anda y escasa de colágeno, también. Pero chica, oyes, nadie es perfecta. Al grano, Cuca, que te pierdes. Cuando me enteré de la noticia en el Heraldo, me dije: "Esta es la mía". Y os preguntaréis por qué. Pues está claro: una mujer como ella debía contar con una mujer como yo. Ya lo estaba viendo: "Rudi y Cuca Guillén, dos rubias a todo tren". Seríamos algo así como la Espe y la Botella. Era mi primer paso en política, así que me fue a Escada y me compré siete trajes que me sentaban como a una diosa y me fui directa a la clínica del doctor Herrera para que me metiera una pizquina de botox ahí donde más le duele a una mujer y me quitara unas lorzas del culo que me sentaban como el ídem. Pues, eso, me dejaron divina y, una vez adecentada para comparecer ante los medios, esperé la llamada del partido. Pues eso que pasa una semana, dos semanas, un mes... Empieza a nombrar a todo tipo de señoronas vulgares sin la mitad de clase que yo, y por supuesto peor vestidas, y me empecé a preguntar: "¿No será que en el partido habrán perdido mi móvil? Llamé a la sede para salir de dudas:

-Soy Cuca, me pasas con Luisa.

-¿Con quién?

-Con Luisa Fernanda Rudi, bobo, a ver si nos empezamos a enterar de quién manda en el partido.

-No está.

-¿Me dejas el móvil que me urge hablar con ella?

-Pues no.

-¿Cómo que no? ¿Pero sabes quién soy?

-Pues no.

-¿Es que solo sabes decir "pues no"? En cuanto tenga despacho en la sede lo primero será hacer una limpieza de incompetentes en el hall. Acabáramos, semejante falta de respeto a una señora que es pasado, presente y futuro del PP aragonés.

Me colgó el teléfono. En fin, dejémoslo estar. Pasó una semana, dos, tres... Una mañana, leyendo el Heraldo, vi que la Rudi cerraba el congreso de los populares de Zaragoza. Así que me planté en el Auditorio. Al poco de llegar yo, apareció ella, como una reina, monísima, demostrando ser una mujer de orden. Yo me acerqué y le dije:

-Hola, Luisa, me he pasado porque, chica, supongo que se te habrá pasado llamarme con el trajín que llevas, pero mira, me he dicho, oyes Cuca, díselo directamente que entre chicas estas cosas se arreglan así. Pues nada, que me he decidido, que quiero entrar en política porque ya no te puedo dar largas más tiempo, que el PP necesita mujeres decididas como nosotras, que dejemos todo por el partido, que apartemos nuestra vida personal a un lado para sacrificarnos por España, que falta hace, ¿sabes lo que te digo? No me digas nada que lo entiendo todo. No hace falta que te disculpes, de verdad. A lo que iba, que había pensado que te podría hacer un buen papel como número tres o cuatro del partido, más que nada para no causar demasiadas envidias en los que ya están, tú me entiendes, ¿no? Pues eso, después ya hablaríamos de las listas. Me veo más de candidata a las municipales, con un buen equipo detrás, por empezar por la base. Después ya seguiríamos hablando.

Ella miró a la derecha, a su escolta (guapo, por cierto), y le hizo un gesto con la cabeza. Se acercó a mí y yo pensé que nos iba a llevar a un lugar más discreto, para hablar las dos con tranquilidad. "Acompáñeme, señora". Yo encantada de la vida. Pero, de repente, me vi en la puñetera calle. ¿Y la presidenta? "La presidenta tiene cosas que hacer. Por favor, no se acerque que no quiero verme obligado a sacar el arma". ¿El arma? ¿Qué arma, Dios bendito?¡¡¡Esto es impresentable!!! Yo, una señora, del partido de toda la vida, una promesa en ciernes, joven valor, atractiva, inteligente, mujer-mujer, tratada como una socialista cualquiera o lo que es peor, como una pobre o como una loca. Esto es el acabose, el pandemónium, el tótum revolutum. Esto lo va a saber Mariano o, si no, Jose Mari y más pronto que tarde. Esa rubia se va a enterar que a mí no me torea nadie, oyes, que esa no me conoce a mí, que no sabe con quién se la juega, que yo seré una señora, pero también soy persona humana y cuando saco la mala leche, la saco. Como que me llamo Cuca (Continuará... o no).

Nos encanta el estilo neo pop art del belga Jan Bollaert. En la imagen, "Montainriver Diva".

Ella te ama...

The Beatles - She Loves You.mp3

The Beatles - I Want To Hold Your Hand.mp3

LA TENTACIÓN

LA TENTACIÓN

Por Cuca Guillén

Desde que me enteré de la noticia estoy con el trankimazin en vena para ver si me sobrepongo, que a golpe de disgustos estoy con el sistema nervioso destrozado, vamos, que ni la gotita de pis se me escapa. Es que es una bomba de esas de agárrate el pareo y no te menees. Mi José María, mi rey, mi señor, se ha liado con una pelandusca y la ha dejado preñada. Y encima francesa, la muy guarra. Lo han sacado hasta en el Interviú, madre del amor hermoso. Engañar así a nuestro José María, ese hombre de Estado, pero que como hombre que es, ha sido embaucado por una lagarta. Ahora la gabacha querrá sacarle los cuartos o, peor, colocar a su bastardillo en el trono de España. Y eso sí que no. Los que estamos a la espera de que nuestro Aznar retorne, como un príncipe, con Ana Botella en los lomos de su corcel, no lo consentiremos… Ay, ay, ay, que me voy, oyes. Y encima, la tía es medio mora. Si no es por el norte, es por el sur. Acorralados nos tienen. Pobre Jose, lo han embolicado y se ha dejado llevar. Como todos. Aunque lo niegue, estoy convencida de que es cierto que se lo haya hecho con la golfa esa, que no es un rumor, porque nuestro Jose María es muy macho y nos tiene loquitas perdidas a todas. Y ante tanta tentación, un hombre, aunque sea de una pieza como él, lo tiene difícil a la hora de resistirse. Incluso con la mora esa. Será cosa del gen o del alelo o de como leches se llame, que los vuelve locos cuando aparecen unas faldas y un buen par de tetas y no les deja comprender que lo bueno lo tienen en casa, con una mujer fiel y católica, madre de sus hijos y hacendosa esposa. Pero ya volverá al redil, porque es un hombre de bien y pese a que está como un queso y que puede elegir entre las mujeres que quiera, sabe lo que le corresponde. Y si busca una querida, pues que sea española, oyes, de Zaragoza, por ejemplo, de buena familia, discreta y con sentido de Estado, bien perfumada, divinamente vestida y limpia por dentro y por fuera. Una misma estaría dispuesta a prestarse a lo que sea por el bien de España. Vamos, digo yo que esto nuestra Santa Madre Iglesia no lo tendrá en cuenta. Al revés, debería hasta dar puntos para el cielo satisfacer a un casto varón como nuestro José María, oyes, que casi es santo y todo. Si es que una es muy sufrida y está para lo que haga falta…

El buen hacer del fotógrafo estadounidense Ryan Robinson siempre llega acompañado de un humor ácido e imprevisible.

Dedicado a los amores platónicos...

Barry White - I Can’t Get Enough Of Your Love, Babe. mp3

Barry White - You’re The First, The Last, My Everything.mp3

Barry White - Sexy Undercovered.mp3

ZONA VIP

ZONA VIP

Por Cuca Guillén

Ayer estuve en la Expo y no os podéis imaginar lo horrorosísimo que fue. Sí, ya sé que la montan los socialistas y por eso precisamente no quería ir, pero Pitusa se puso pesada y allí que nos plantamos las dos en Ranillas con la permanente puesta, taconazos de Manolo Blahnik y un vestido de Yves Saint Laurent por eso de rendir un sentido homenaje a quien tanto ha hecho por nosotras. Y maldito el momento en que se me ocurrió ir a semejante majadería. El chófer de Pitusa había sobornado a los de seguridad para dejarnos en la misma puerta. “¿Dónde está la entrada de los VIP?”, pregunté al llegar. “Ah… Pues no sé. ¿Tienen acreditación?”. ¿Acreditaqué? “Mire señor –le dije de muy buenas maneras-, soy Cuca Guillén, señora de Vargas, y creo que a estas alturas no necesito acreditarme para nada”. “Señora, si no tiene acreditación tendrá que comprar una entrada”, me dijo el muy maleducado. ¿Una entrada? ¿Como los pobres? Pitusa, que es muy conformada, trató de arreglarlo. “Cuca, déjalo estar, que compro dos entradas. Por perras será…”. Al final, entramos y la verdad es que se confirmaron mis peores augurios. Todo lleno de gordos, con cámaras de fotos, gritando, comiendo con la boca abierta y eructando al mismo tiempo. Esas gorras, esos pantalones cortos, esas gafas de sol baratas… ¿Es que soy la única que sabe vestir decentemente y la regularidad con la que hay que acudir al cirujano plástico?
    Ante tanta vulgaridad, me acerqué a un chavalito de uniforme azul. “Chico, ¿dónde está la zona VIP?”, le pregunté. “Ah… Pues no sé”, me dijo. Ni lo sabía él ni lo sabía nadie. El sol caía a plomo y me estaba entrando la sudadina, con lo mal que me sienta. “Pitusa, saca el abanico y el perfume, que esto va para largo”, gruñí. Preguntamos a uno, a otro… Nada. “Oye Cuca, ¿y si viéramos algo de la Expo?”, protestó Pitusa. “Ni hablar, nosotras nos vamos con los VIP y con la comitiva oficial para que nos abran paso entre la chusma. Faltaría más”, repliqué. Al final, di con una azafata que parecía más enterada. “La sala VIP más cercana está en el palacio de Congresos”. Pues allí que nos fuimos. En la puerta, otro idiota. “Esta zona está cerrada al público. Solo pueden pasar autoridades”, me dijo. ¿Y qué soy yo más que una autoridad en esta ciudad miserable y desagradecida con los de nuestra clase? Tuve que improvisar: “Es que soy la esposa del embajador de Guatemala y ella es mi secretaria”. Pitusa me miraba con ganas de matar, no sé si por el numerito o por haberla rebajado a secretaria. “Espere, que voy a mirar en la lista de invitados”, me contestó.
    Cuando se giró para coger los papeles, agarré a Pitusa del brazo y eché a correr a toda pastilla hacia la zona VIP. Nunca les exigí tanto a mis “manolos”. Casi estaba a punto de llegar cuando me hicieron la zancadilla y caí al suelo. Siete policías se me echaron encima y mientras uno me ponía las esposas, otro me apuntaba con una pistola a la cabeza. “Soy… Cuca Guillén, señora de Vargas… y ¡¡¡me han roto un tacón!!!”. Dos horas más tarde, mi marido me sacó del calabozo. Qué desastre de Expo, qué malísima organización, siempre dando la nota los españoles. La última vez que me ven el pelo por ahí. ¡¡¡Ni me pagaron los “manolos”!!! Donde esté la Peñaza...

Knotan es un auténtico macarra de la fotografía. No se corta un pelo...

Para ti, Cuca...

Lola Flores - María de la O.mp3

PADRE NUESTRO

PADRE NUESTRO

Por Cuca Guillén

Estaba yo con Pitusa en la peluquería, cuando después de un ratito de charla apasionada bajo la secadora, va y me dice:
    -Oye, y tú qué opinas de todo esto.

    -Pues chica oyes, yo lo tengo superclaro.
    Y es que una ha madurado mucho últimamente a golpe de desgracias. Mi marido ha votado a Zapatero y eso le ha costado el exilio a la casa de invitados. No sé si se habrá cumplido la cuarentena, pero por si acaso. Y tuve que soportar el acoso, en la mismísima parroquia de Santa Engracia, de un cura pervertido sexual. Y no solo eso. Hace unos días no me aceptaron la Visa Oro en Escada y del bochorno que pillé aún me estoy recuperando. Pero son cosas de la vida que a una la hacen madurar, vamos, que ante un drama como el que estamos viviendo la gente de orden de esta nación española, ese bagaje nos hace fuertes, nos da capacidad para sobreponernos a la adversidad y luchar por lo que más queremos: por España. Qué bien me ha salido, oyes.
    -Cuca, todo el día diciéndome que lo tienes superclaro, pero no lo aclaras. ¿Eres liberal, conservadora o democristiana o qué leches eres? Yo con tanto lío, ya no sé ni lo que soy.
    "Una petarda es lo que es", se oyó a Paquito, que le estaba cardando el pelo a una finfi con
perfume de Gilca y un vestido horrorosísimo de la muerte que debía de ser amiga suya.
    -¡Paquito, un respeto, que me vuelvo a la peluquería de Pepita que siempre me daba la razón!-le grité
.
    -¡¡¡Y te dejaba los pelos como la Terremoto de Alcorcón!!!
    Cuando se pone con los pareados, lo mataría... A propósito... ¿quién es la Terremoto de Alcorcón?...
    -Cuca, déjale y a lo que vamos. ¿Eres liberal, conservadora o qué?
    -Pitusa, parece mentira. ¿Qué voy a ser? Yo soy de derechas de toda la vida y a mucha honra. ¿Es que lo dudas?
    -Ya, pero entre Esperanza y Mariano, con quién te quedas.
    -Uhmmmm... Pues Mariano, qué quieres que te diga Pitusa, con ese porte gallego, esa pinta de registrador de la propiedad y ese puro en la boca, pues oyes, admito que me pone un poco y que Dios me perdone. Y más desde que mi marido va de rojo y se ha cortado toda posibilidad de… vamos… Eso... Que estoy un poco desatendida. Pero Espe... Espe es mucha Espe. Espe es como nosotras, pero con más huevos (con perdón). De todas formas, creo que ese no es el problema.
    -¿Ah no?
    -Que no, que no, que para echar a los rojos separatistas de poder nos hace falta algo más…
    -Ya sé a lo que te refieres…
    -Ya te digo…
    Salimos de la peluquería como dos reinas. Pintadas como puertas, pero como dos reinas. Sin embargo, estábamos preocupadas, conscientes de que era un momento crítico, que España nos necesitaba. Nos fuimos las dos directas a Santa Engracia a echar unos rezos antes de misa de siete. Nos encomendamos al salvador, al hombre, al mito... “José María Aznar, que estás en los cielos, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu reino, hágase tu voluntad…”.

Minako Saito nos trae desde el lejano oriente un mundo de belleza, glamour y fantasía.

Más o menos lo mismo que ella...

La Terremoto de Alcorcón - Love Is In The Air.mp3

CUATRO AÑOS MÁS

CUATRO AÑOS MÁS

Por Cuca Guillén

No sé cómo voy a escibir estas líneas porque me está temblado todo el cuerpo. Lo sé, debería ponerme digna, como la Rudi, pero no puedo. El domingo tuvo que venir el médico a casa para atiborrarme a haloperidol porque estaba con los nervios destrozados, con una crisis de ansiedad de no te menees, llorando como una loca e hinchándome a cruasanes. Es que ha sido muy fuerte, oyes, cuatro años esperando a que la España decente volviera donde debe estar y nada, el acabose, los separatistas y los ateos otra vez a gobernar. Me falta el aire, siento que la cabeza me va a estallar y que el corazón se me va a escapar del pecho. ¡¡¡Cuatro años más de opresión socialista!!! Ya me veo yo a los inmigrantes entrando a saco en las urbanizaciones a comerse el jabugo de la gente de bien. Ya me veo a los homosexuales fornicando en la plaza de España mientras los de los sindicatos entran en la iglesia de Santa Engracia para llevarse las alhajas y los santos antes de quemarlo todo. ¡Hasta Escada van a expropiar los sociatas para darle los modelitos a las queridas! Y lo peor de todo es mi marido, que cada vez que me da la crisis se parte de risa, porque al final el muy traidor ha votado a Zapatero y me ha puesto en el más vergonzoso de los ridículos ante los socios de la Peñaza y ante España entera. Pitusa me ha llamado esta mañana y me ha dicho que está buscando piso en Mónaco para llevarse las perras a un lugar seguro, donde no haya rojos, y que no piensa regresar a España hasta que vuelva el orden. Y yo estoy pensando en hacer lo mismo. Este país nuestro se nos va al carajo. Menos mal que nos queda Rouco Varela. Ese sí que sabe ganar elecciones.

Los histriónicos personajes de Amy Vangsgard tienen una mirada tan infantil y colorista como perversa.

Celebremos que los fanáticos estén llorando sus penas...

The Pipettes - ABC.mp3

The Pipettes - Pull Shapes.mp3

The Pipettes - Dance And Boogie.mp3

QUÉ FUERTE...

QUÉ FUERTE...

Por Cuca Guillén

Esto es muy fuerte, hard, hard, hardcore, que dice mi peluquero Paquito cuando ve a la guarrindonga de la Esteban en top less en la Interviú. Llevo toda la semana sin dormir, a base de bollos con crema y dándole candela a la Visa, porque es que no lo puedo soportar, chica, que yo esto nunca me habría imaginado que me pudiera pasar a mí, una mujer con una reputación intachable y que lo más rojo que ha tenido cerca ha sido un traje de Valentino. Una vergüenza, oyes, que ni se lo he mencionado a Pitusa, que aunque vaya de amiga en el fondo es muy cotilla y sería decírselo y pasarse por la Peñaza para contárselo a todas las perracas que están por ahí con los colmillos afilados buscando una excusa para hundirme, vamos, que me las conozco. Bueno, empiezo por el principio, que si no me atropello y no se me entiende. Estaba pasando una fase de mi vida superfeliz, porque llegan las elecciones y las cosas se van a volver otra vez a su sitio, que es donde deben estar, con los nuestros en el gobierno para poner orden en esta España de separatistas, ateos y homosexuales (ya me perdonarás Paquito, pero lo que es, es). Los curas ya nos han llamado a la gente de bien a votar a don Mariano, el Cañete diciendo verdades como puños (que sí, que lo corroboro, que las ecuatorianas no hacen las camas como se hacían antes, cuando el servicio de hogar era patrio y rezaba el rosario en la cocina) y el traidor de Gallardón, en una esquina castigado por rojo y repelente niño Vicente (es que yo siempre he sido muy de la Espe, oyes). Y en estas, me entero de la noticia. Estaba en la cama con Carlos, con la mascarilla facial y las rodajas de pepino, y va y me suelta: “Pues yo igual voto a Zapatero”. “¡¡¡¿¿¿¿QUÉÉÉÉÉÉÉ?????!!!”, grité. Le metí un guantazo y me entró el pánico. Pero luego me dije: “Ah, tonta, será una broma, cómo es este Carlos… Si es de derechas de toda la vida, como yo”. No era broma. “¿Qué pasa, que no puedo votar a quien quiera o qué?”, me contestó. ¿A quien quiera? Pero cómo va a votar a quien quiera, hay que votar bien y votar bien es votar a don Mariano, no cabe otra opción, por Dios bendito… Después de dos horas de pollo descomunal, acabé en la cocina llorando, hinchándome a valerianas y a cruasanes. ¿Y ahora que hago yo? Como esto trascienda, voy a ser la risa del golf, con todos chismorreando y diciendo: “Mira, por ahí va la mujer del rojo”. Qué humillación. Y estoy convencida de que esto es el principio, que Carlos empieza por votar al Zapatitos y se acaba fugando con una pelandusca con las tetas más operadas que yo, que estos del PSOE son todos unos salidos. O peor, se me hace maricón. ¿Y ahora cómo me separo yo si soy católica y no me puedo divorciar? Esto lo voy a tener que apañar en La Rota... ¿Y qué va a pasar con los niños? ¿Se les reirán en el colegio y crecerán traumatizados por culpa del imbécil de su padre? Oyes, que de momento mi marido no se acerca a los críos por lo que pueda pasar, que hay que vigilar su educación, y hasta que las cosas no cambien va a dormir a la casita de los invitados, no nos vaya a pegar alguna enfermedad, que con estos rojos nunca se sabe. Y yo a ver si resuelvo esto lo antes posible porque solo tengo un mes para mantener unida a esta familia. Es que no doy para desgracias. Es un suma y sigue. ¿Pero por qué tengo tan mala suerte con los hombres?

Agustín Sciammarella es un magnífico ilustrador y caricaturista argentino que trabaja para el diario El País. En la imagen, uno de sus dibujos de Rodríguez Zapatero.

Hoy toca divertirse...

EMF – Unbelievable.mp3

Gnarls Barkley – Run.mp3

Madness – Our House.mp3

TENGO UNA MISIÓN

TENGO UNA MISIÓN

Por Cuca Guillén

El otro día se lo contaba yo a don Damián, el parroco nuevo de Santa Engracia, que es un cura de los de toda la vida: calvo, viejo y de derechas, como Dios manda. Ya está bien de pastores descarriados como don Alejandro, que menudo follón montó. ¡Hasta tuvo que intervenir el arzobispado! Pues eso, oyes, que le decía a don Damián que todo se tambalea. Que si los gays, que si las prostitutas, que si los abortos, que si los divorcios, que si familias monoparentales que a saber qué leches es eso. Seguro que alguna cochinada que se ha inventado el PSOE… Chica, a este país nuestro no lo reconozco, con estos sociatas a los que solo les va la corrupción y el despelote. No puede ser, que una cosa es una cosa y otra un totum revolutum que nos va a llevar directamente a las calderas del infierno. Oyes, que se empieza por abrir un poco la mano y te cogen el codo y lo que no es el codo y esto acaba siendo Sodoma y Gomorra. Que la Virgen del Pilar nos proteja. No hay más que ver este blog, que se está convirtiendo en un antro de perdición y en un nido de rojos. Si ya me lo dijo Pitusa: “No te mezcles con la chusma que luego pasa lo que pasa”. Pues al final ha pasado. Primero fue lo del cura. Luego lo de las fotos blasfemas de nuestro Señor Jesucristo, que no quiero ni recordarlo. Menudo sofocón. Encima me entero el otro día que Amadeo, además de asaltar a señoras decentes, anda con mujeres de mala vida. Si ya sabía yo que ese hombre era un degenerado. Además, me acaban de decir que estuvo en la cárcel cuando gobernaba el Caudillo por ir con comunistas. Alabado sea el Señor, lo que me quedaba por oír. Luego, aquí hay alguno que anda colocando fotos de marranadas y escribiendo barbaridades de lo más soez. Parecen unos salidos estos de La caja de los hilos. El último artículo me ha dejado patidifusa. Va uno, que dice llamarse Pablo Díaz, y suelta que es ateo y otras cosas que no quiero ni reproducir. Como si aquí cualquiera pudiera decir lo que le da la gana. Ya solo les falta que pongan a una dulce monjita haciendo guarrerías. En fin, que lo que querrían todos estos zafios es que diera un portazo y me fuera. Pues no, no me voy, porque tengo la impresión de que nuestro Señor me ha encomendado una misión: me ha llevado hasta esta bitácora para que la devuelva al buen camino por la vía del apostolado. ¡Por mis narices que este blog va a ser católico, apostólico y romano! ¡No saben quién soy yo! ¡O si no, pido refuerzos a las de la Peñaza!

Andrés Serrano, uno de nuestros favoritos, vuelve a este blog con uno de sus trabajos más polémicos, incluido en su serie "Interpretation of dreams", inspirada en el magisterio de Freud. La obra se titula "Triumph of the flesh".

PJ Harvey – The Devil.mp3

Rolling Stones – Sympathy For The Devil.mp3

The Clash – Straight To Hell.mp3

Iron Maiden – The Number Of The Beast.mp3

…SIN PECADO CONCEBIDA (II)

…SIN PECADO CONCEBIDA (II)

Por Cuca Guillén

(Viene del artículo anterior)

¿Por dónde iba? Ay, sí, que aquellas palabras de don Alejandro las tuvo que inspirar el mismísimo demonio.

-Pues sí, don Alejandro, lo tengo que reconocer –le iba yo diciendo-. Aquel hombre me tocó y, en vez de avergonzarme por no haber sabido evitar el peligro, quizá me dejé llevar por los pensamientos más impuros…

-Bueno, bueno…

-¿Bueno qué?

-¿Te falta mucho?

-¿Qué?

-Que si te falta mucho, que me estoy empezando a aburrir –me dijo don Alejandro-. Vamos, que se me están hinchando los huevos de escuchar tantas chorradas. ¿Te lo tiraste o no?

-Don Alejandro, por Dios…

Prometo que me lo dijo así, que no me lo estoy inventando. Helada me quedé con don Alejandro, tanto que me tuve que poner una chaqueta nueva de Prada que me acababa de comprar y que me había costado un dineral. Pero no me entretengo con minucias. Don Alejandro salió del confesionario dando un portazo, arrojó la estola al suelo y gritó (reproduzco exactamente lo que dijo, porque esas palabras endemoniadas se me quedaron grabadas a fuego, oyes. Que Dios me perdone):

-¿¿¿Por qué cojones tengo que aguantar yo a estas soplapollas mal folladas??? ¿¿¿Por qué hostias tengo que ser yo el jodido cura de esta mierda de blog y estar todo el día con viejas chochas que no saben ni dónde está el dedo para darse gusto al coño??? Quiero un cambio de personaje ya. Encima me pagan una puta miseria. Con lo que yo he sido. Os recuerdo que en el último blog en el que estuve era un actor porno con una polla de 32 centímetros y todo el día andaba follándome a lo mejorcito del star system. Y cobraba el doble. Aquí va y me toca ser el tontolaba del cura. Me cago en Dios y en todo el santoral. ¡¡¡Me vais a cambiar el papel echando hostias!!! No voy a estar ni un minuto más haciendo esta mierda. Ahora mismo me voy a ver al Sastre a poner las cosas bien claritas y a esta zorra que la confiese su puta madre…

Don Alejandro se marchó dejándome allí de rodillas y con la boca abierta. Sí, de rodillas y con la boca abierta… ¿Qué pasa? ¿Por qué os estáis riendo todos? Ay, no enredéis, que ya termino. Después de recordar las palabras del párroco, la verdad, es que no sé cómo seguir. Tres avemarías me metí y me pasé directamente por Loewe para recuperarme del sofoco. De vuelta a casa, alucinada iba, llorando a lágrima viva. Es que esto solo me pasa a mí, parece un castigo de Dios. O igual es que tengo muy mala suerte con los hombres, no sé. Al menos me queda la Virgen de Pilar, Pitusa y la pasarela Cibeles… Que entre mujeres, otra cosica es, para qué nos vamos a engañar. Somos de otra manera… Y ahora que lo pienso. ¿Y quién me confiesa a mí? Porque todo esto tiene que ser pecado mortal, que el cura debía estar endemoniado lo menos. ¿Habrá que llamar a un exorcista del Arzobispado? ¿Se me habrá pegado algo? Ay madre, qué angustias… Ave María purísima...

Una de las obras más polémicas de Andres Serrano es Piss Christ. El autor introdujo un crucifijo en un vaso con su propia orina y los sectores ultraconservadores norteamericanos le acusaron de blasfemo.

Escuchad la palabra de Jesús...

Wilco – Jesus Etc.mp3.

Soundgarden – Jesus Christ Pose.mp3.

Nirvana – Jesus Doesn’t Want Me For A Sunbeam.mp3

AVE MARÍA PURÍSIMA... (I)

AVE MARÍA PURÍSIMA... (I)

Por Cuca Guillén

Lo último que me ha pasado es muy gordo. Gordo, gordísimo. Oyes, que no se lo he contando ni a Pitusa de lo gordo que es. No por nada, sino porque al final, como siempre, acabaría echándome la culpa y en estas no he tenido ninguna. Que me parta un rayo ahora mismo si miento, lo juro por Versace que Dios lo tenga en su gloria. Pues lo que decía, que fue gordo, gordísimo, tanto que llevo dos días hinchándome a profiteroles y con el rosario a cuestas para reponerme de la impresión. A ver por dónde empiezo y cómo lo cuento, porque a veces contar estas cosas a una la ponen casi en las puertas del pecado mortal. Y si algo no quiero hacer es pecar. No solo porque sea una fiel cumplidora de los principios católicos, apostólicos y romanos, devota de la Virgen del Pilar y dama piadosa donde las haya, sino porque quiero estar una temporadita lejos del confesionario. Y os preguntaréis por qué. Pues os lo voy a contar, pero que no salga de aquí porque si esto lo acabara leyendo alguna perraca de la Peñaza que yo me sé, ya empezaría a pedir mi excomunión. Y eso sí que no, oyes, que una tiene reclinatorio reservado en Santa Engracia y no está el horno para bollos.
El caso es que el otro día me pasé por la parroquia para cumplir con el sagrado sacramento de la Penitencia. Oyes, que una llevaba una temporada con algunas aventurillas un tanto pecaminosas, veniales en todo caso, pero mejor prevenir que curar, que el infierno está más lleno que un Zara de rebajas. Me arrodillé como siempre, saludé como solo saludan las señoras de bien a nuestro párroco, Don Alejandro, y empecé la confesión:

-Ave María purísima.

-Sin pecado concebida. ¿De qué se acusa, hija mía?

-Pues don Alejandro, me acuso de llevar una vida disoluta, de haber caído en las tentaciones más infames… (Siempre exagero un poco en el confesionario, no vaya a ser que el cura sea un blandengue, me ponga poca penitencia y acabe lamentándolo en las llamas del averno).

-Prosiga, hija mía…

-Sin ir más lejos, la semana pasada me fui con mi peluquero a una fiesta, que tiene delito, porque una es mujer casada y honrada. No es por disculparme, don Alejandro, pero en el fondo fue por caridad cristiana. Es que mi peluquero es mariquita y estoy tratando de curarle, como bien dice nuestra querida amiga Cristina López Chuilching. Pero vamos, que también me apetecía ver las fiestas de los pobres y eso, pero bueno, en fins, que me estoy liando oyes…

-Al grano, doña Cuca…

Yo le seguí contando la verdad. Lo de que el otro día le grité más de la cuenta a los niños por jugar con hijos de obreros, que discutí con mi marido por no traerme un pedrusco de su último viaje a Bruselas, que dije que hay un zorrón en la Peñaza se entiende con un abogado del Estado de Pamplona que la ha dejado embarazada y que le ha endilgado la criatura al marido… Vamos, lo de siempre. Eso sí, no me pude callar lo del guarro ese de la fiesta de Paquito. Sí, ese que me tocó estas nalgas que tengo tan bien puestas por obra y gracia de la Madre Naturaleza y de la Corporación Dermoestética. No sabéis lo mal que lo pasé con ese calvo tan rudo, tan hombre, con esas manos tan firmes, esos músculos, esos tajuajes… Uy, uy, uy, que me pierdo. Pues que por ahí fue la confesión, con sus más y sus menos y sus menos y sus más. Y en estas, don Alejandro me dejó de piedra. Oyes, oyes, lo que me dijo, vergüenza me da repetir aquellas palabras que tuvo que inspirar el mismísimo demonio, porque otra explicación no le veo… (Continuará).

Uno de nuestros autores favoritos es el polémico Andrés Serrano, un artista neoyorquino que tiene una visión muy particular del catolicismo. La imagen que ilustra este post se titula "Heaven and Hell". Su web ofrece una muestra de sus últimos trabajos.

Un Jesús muy personal...

Depeche Mode – Personal Jesus.mp3.

Johnny Cash – Personal Jesus.mp3

Marilyn Manson - Personal Jesus.mp3

UN DESLIZ

UN DESLIZ

Por Cuca Guillén

-Estás de guasa, Cuca –me dijo Pitusa cuando se lo conté.

-Que no, chica, que no –le contesté.

-Me estás tomando el pelo.

-Oyes, que no.

-Que no me lo creo.

-Ya te digo yo que sí.

-Mira, Cuca, que te conozco hace años y tú no eres así.

-Pitusa, que no sé lo que me ha pasado, pero me ha pasado. No sé, habrá sido el calor, el verano, Carlos, que siempre está de viaje, no sé... Sólo sé que te lo tenía que decir, que no me podía quedar con esto dentro. Pero, porfa, no se lo digas a nadie, ni a tu marido.

-Cuquita, dime la verdad. ¿Has estado bebiendo?

-Oyes, oyes, que una es una señora, casada y con hijos, de la parroquia de Santa Engracia y dama de la Corte de Honor de la Virgen del Pilar. Esto no cambia nada.

-¿Cómo que no cambia nada? Tú has bebido.

-Pitusa, si no me crees tú, ¿quién me va a creer?

-Chica, que no estoy para bromas.

-Ni yo. Pero tampoco creo que sea para tanto.

-Ay, madre, que te vamos a tener que llevar al médico.

-¿Al médico?

-Por si has cogido una enfermedad de transmisión de ésas, el sida o algo…

-Oyes, oyes, no me angusties…

-¿Has hablado con tu marido?

-¿Con Carlos? ¿Para qué?

-Si, hija, sí, con Carlos. Esto es algo que deberías resolver en pareja, lo deberías afrontar cuanto antes. ¿O es que piensas engañarle?

-Hombre, por una vez…

-Ni una vez ni gaitas, Cuca. Y con el párroco también, para que te ponga una buena penitencia.

-¿Con don Alejandro? Me da una vergüenza…

-Pues habértelo pensado antes. Ahora ya no hay vuelta atrás. Lo hecho, hecho está.

-Maña, no sé…

-Pero, ¿cómo ha podido pasar? ¿Cómo no nos dimos cuenta antes?

-Pues la verdad es que me sentó divinamente. Fue una forma de romper la monotonía, ¿no?, ¿sabes lo que te digo?

-Cuca, no hables más. Encima regodeándote, como una fulana. Prométeme que no lo volverás a hacer nunca.

-Vale, vale… Pero si sólo fueron unas bragas.

-Sí, ¡pero te las compraste en Grancasa por ocho euros! ¡Cómo una yonki!

-Es que eran tan monas…

-Cuca, no sé lo que voy a hacer contigo. Ahora tengo que ir a buscar a los niños, pero ya hablaremos tú y yo, porque esto no puede quedar así. Unas bragas en Grancasa, ¡por Dios bendito! Preocupada me voy…

-Anda, anda… Ya te llamaré Pitusina... Mua, mua

-Mua, mua… Ay, Cuquita, no me des más estos sustos… ¡Dónde vamos a parar!

John Kacere es un pintor con un insistente fetichismo por la ropa interior femenina.

Hoy es el día perfecto para escuchar a Nina...

Nina Simone - Feeling good.mp3

Nina Simone - Sinnerman.mp3

Nina Simone - I Put A Spell On You.mp3

DE LA OFRENDA A LOS TOROS

DE LA OFRENDA A LOS TOROS

Por Cuca Guillén

¡Menudo día lleve ayer! Como don Mariano nos ha dicho que teníamos que aprovechar el día del Pilar para demostrar con un gesto nuestra españolidad, pues a esas me puse. Qué mejor gesto español que ir a la Ofrenda. Bueno, admito que iba a ir, como todos los años desde que tengo uso de razón, pero, oyes, que de paso aprovecho y rindo pleitesía a nuestra Virgen y a nuestro Mariano. Pues nada, que me enfundo mi traje de baturra de tres millones de pesetas, nuevo, por supuesto, como cada Pilar, que para heredar ya están otras. Nos fuimos todas las de la Peñaza, todicas con los ramos encargados en la plaza de los Sitios. Pero para qué nos vamos a engañar. El mejor traje, el mío, que para eso ha nacido una con estilo, saber estar y perras en el bolsillo. Qué español todo, oyes, que estaba tan española que si me pinchaban no me salía sangre roja. Me salía rojigualda. Estuve a punto de ponerme las bragas esas con la bandera de España que me regaló mi marido después de un viaje a Cordoba, el muy picantón. Pero no, chica, que una es una señora y todas esas cosas son guarrerías. Pero me coloqué un pin de la Virgen, otro del PP y otro de la bandera de España y a patriota no me ganaba nadie. Ni Jiménez Losantos. Eso sí, como siempre, me tuve que juntar con los pobres, mañicos ellos. Pasé el trago como pude, oyes, pero una es muy devota y por su Virgen lo hace todo. Hasta el mayor sacrificio. Además, de todo tiene que haber, pobrecicos desgraciaos. Pues eso, que después de la Ofrenda, me fui a comer con mi marido, la suegra y los críos. Todo encargado, eso sí, que no le voy a obligar al servicio a cocinar en el Pilar. Pero por la tarde también tenía que ser española. ¿Y qué hay más español que los toros? A la plaza que me marché con mi marido y con Pitusa y el suyo. A ellos los dejamos con los puros y la lidia, y nosotras, con los vestidos de baturra más caros de toda la plaza. Y bien perfumadas y pintadas. Y oyes, oyes, oyes… En la puerta me encontré a los del “Tomate”. Me arreglé un pelín, no fuera a salir en la tele, que una tiene hechuras de famosa. A lo que iba. Toreaba el Jesulín, el de los sujetadores y las bragas, que se cortaba la coleta. Pero, ¿a qué no sabéis a quién vi? A la Campanario. Patidifusa me quedé. “¿Y dónde está la Campa?”, me preguntó Pitusa. “Pues allí chica, con la Carmen Bazán, por allí, que no te enteras”, le dije. “Pues no la veo”, insistió. Ay Pitusa, que no está en este mundo… Una ordinaria me pareció la Campanario. Al final sale en las revistas cualquiera. Con los méritos que acumulo yo y el juego que daría… Dejémoslo estar. No me fijé mucho en la corrida, porque allí una va a lo que va: a que la vean. Agotadica llegué a casa. Allí vino el susto. Me estaba quitando el vestido y va mi marido y me pregunta: “¿Qué es eso que llevas ahí?”. ¿Sabéis lo que era? ¡¡¡Una bandera republicana que me habían colgado en la espalda!!! Seguro que han sido algún pobre en la Ofrenda o alguna de las perracas de la Peñaza, que solo piensan en hundirme. Hoy estoy desolada. No solo por haber defraudado a don Mariano, que también. Lo peor de todo es que ya me estoy viendo en el “Tomate” la semana que viene bautizada como la baturra roja republicana… Y eso sí que no. Es que ya no queda gente de bien, don Mariano. Solo usted y yo.

Luis Grañena es un magnífico infografista e ilustrador zaragozano, que trabaja para Heraldo de Aragón. La caricatura de Jesulín de Ubrique fue publicada en el veterano diario aragonés el pasado 12 de octubre.

Como Cuca nos tiene enamorados tal y como es, le vamos a dedicar unos pasodobles. A Rajoy no le dedicamos nada. Por capullo.

Suspiros de España.mp3

El gato montés.mp3

España cañí.mp3

BOSÉ

BOSÉ

Por Cuca Guillén

Mira que se puso pesada Pitusa. Que si no tenemos edad, que qué pensará la gente, que no podemos dejar a los niños solos… “O vienes o te quedas”, le dije mientras terminaba con la segunda capa de pote y me ceñía unos vaqueros de Dolce & Gabanna que me había comprado para la ocasión. La plaza de toros estaba estupenda. No venía desde el último mitin de Rajoy. Yo soy muy fiel al partido, pero Bosé es Bosé, qué le vamos a hacer. Y mira por dónde, que nada más entrar, allí me encontré con Mari Cielo, la mujer del socio de Carlos, con lo que me odia la muy perra. Iba con Sonsoles y Almudena, las dos de la Peñaza. Menudas arpías. Me saludaron de lejos moviendo el bolsito. Pitusa se puso como una moto. “Que hay gente conocida, Cuca, que nos han visto. Ya te lo decía yo…”, murmuró mientras me agarraba por el brazo. “Hala, chica, que no pasa nada…”, gruñí. En éstas, bajaron las luces y salió él. Llevaba un traje negro maravilloso, con su barba de tres días, sus ojeras de tres noches… Oyes, que está tremendo el Bosé. Empezó con “Nena”, siguió con “Bambú”, “Morena mía”… Era el éxtasis, como aquella vez que vino el Papa a Zaragoza y las chicas de Sansueña le pudimos dar la mano… Yo no veía a nadie. Sólo él y yo. Qué guapo, qué voz, qué ojos, qué boca… Era como un sueño, como volver a tener 14 años. Al final, no me pude reprimir. Ni las lecturas de “Camino”, ni los retiros espirituales, ni los discursos de José María Aznar pudieron frenarme. “¡¡¡Eso es un culazo, sí señor!!!”, solté a pleno pulmón. Lo dije sin pensar, de golpe, así, a lo bruto, y justo en ese momento en que no había música y se había hecho un silencio sepulcral. Se escuchó en toda la plaza. Dios bendito… Él también lo oyó. Me buscó entre el público y me miró. Sonrió. Y yo casi me muero… “Cuca, Cuca, ya está bien, ya hemos hecho bastante el ridículo”, me riñó Pitusa. Entonces desperté. Mari Cielo, Sónsoles y Almudena me señalaban y cuchicheaban. Se relamían. Salimos por la puerta de atrás, donde nos esperaba el chófer. Pitusa, con los morros más apretados que nunca, ni me dirigía la palabra. Pero me daba igual. Bosé me había mirado, me había sonreído… Qué hombre, por Dios, qué hombre. Qué culazo…

El diseñador David Delfín se encargó de la portada de Papito, el último disco de Miguel Bosé. El cantante actuó el pasado viernes en Zaragoza dentro de su gira Papitour.

Miguel Bosé – Morena mía.mp3

Miguel Bosé – Si tú no vuelves.mp3

MONTEMUZO MON AMOUR

MONTEMUZO MON AMOUR

Por Cuca Guillén

Estaba el viernes con Pitusa en la Kupela tomando una tapita a eso de las una. Me estaba contando que iba volada, que se bebía el rosadito y se iba a casa. A las tres llegaba Claudio, el chofer que se la lleva al chalé de Cadaqués con los niños a pasar el mes de agosto. “Chica, tranquila, espera que me tome el vino”, dije con media loncha de jabugo en la boca. “Que me voy, que tengo que hacerles la maleta a los críos. Mua, mua”, me respondió lanzándome dos besos desde la puerta. Y ahí me quedé, con mi jabugo y más sola que la una. En ésas salí de la Kupela y me quedé mirando el palacio de Montemuzo. Dany Leriche. Algo me comentó Paquito, mi peluquero, que es un poco mariquita y que siempre está de saraos por ahí. “Cuca, pásate por Montemuzo que hay una exposición que es cosa fina. Mujeres, mujeres. Rotundas, sublimes, fashion… Y con un punto clásico, así como casi renacentista que me priva. Además, parece que se ríen de los hombres, como que entre ellas se apañan. ¿Sabes? Deliciosas. Te acompaño cuando quieras”, me gritó hace dos días. Pues, oyes, que ya que estamos, voy a ver qué tal. Subo las escaleritas, cruzo la puerta de cristal, entro y… Oyes, oyes, oyes… ¡¡¡Que están como Dios las trajo al mundo!!! Y encima aquí sólo está el de la puerta. Qué cosas. Pero ya que estoy, me meto… Si me viera don Alejandro, el párroco de santa Engracia... Kerstin & Inga… ¡¡¡Si hay una abuela en cueros!!! Lo que hay que ver… Issabelle y Dominique. Dicen que si te acercas y te alejas y miras fijamente ves no sé qué. Estuve diez minutos intentando pillarlo y nada. Había una encima de una rueda, y una madre (un poco pasadita de peso) con su hija y otra… ¡¡¡Crucificada al revés!!! Uy ésas, qué cuerpazos, y parece que sin pasar por el quirófano. Ay, madre… Bueno, que me voy. Que como me pillen aquí, a ver cómo lo explico. Ya hablaré yo con Paquito…

 

La muestra de la fotógrafa francesa Dany Leriche se puede visitar hasta el próximo 19 de agosto en el palacio de Montemuzo de Zaragoza. La mayoría de las obras forman parte de las series “Les Filles de Ripa” y “Portraits sous influence”, que también se pueden disfrutar en la web de la artista.

The Chordettes – Never on Sunday.mp3

Pink Martini - Never on Sunday mp3

Andy Williams – Never on Sunday.mp3

DE ‘SHOPPING’ EN LA MAGNÉTICA

DE ‘SHOPPING’ EN LA MAGNÉTICA

Estos chicos se prendaron del mismo vestido y casi se tiran de los pelos. Es que hay gente para todo...

Por Cuca Guillén

Se lo dije a mi amiga Pitusa y me miró como si estuviera loca. Que sí, ya verás qué divertido, le dije, será un mercadillo, irán chicos jóvenes, con discos, libros, ropa… “Mira, que ya estoy muy mayor. A mí no me llevas a un antro a probarme ropa de segunda mano. A ver si me entra una infección. Lo de ir a un pase de modelos en Grancasa, vale, pero esto es demasiado. Mira, Cuca, que no. Y como se enteren en la Peñaza, nos ponen a caldo. Que no, que no, que no…”, me respondió tajante. Yo le contesté que vale, que tenía razón, que ya no éramos crías. Pero cuando se marchó a recoger a los niños a la piscina, pues oyes, que cogí la cámara de retratar de mi marido y allí me planté. Espoz y Mina, 17. La Casa Magnética. Fíjate que me había puesto para la ocasión, con un Chanel discretito que me había comprado en el Corte Inglés. No quería llamar la atención. Al bajar por las escaleras, todo me pareció raro. Tan oscuro, esa música que ni me sonaba, la gente con esos pelos… Vamos, que no era el Gregory’s. La verdad es que todos me miraban. Supongo que las clases bajas no están acostumbradas a tanto buen gusto así de repente. Y eso que el Chanel era de rebajas. Pues nada, que me puse a mirar qué se vendía y a hacer unas fotos para el blog. No entendía nada. De los libros, poca cosa. Y de discos... Los vendían a cinco euros, por lo que me imaginé que no serían muy allá. Además no conocía a ninguno. Bueno, miento, que encontré uno de Mecano de mis tiempos. Había un casco y una cazadora a 15 euros. Como la cosa cultural no me iba mucho, me fui hacia las ropas. A ver, a ver… En fin, horroroso. Para qué decir más. Ni en las fiestas de disfraces que Pitusa organiza en el chalé me ponía uno de ésos. Pero mientras le echaba un ojo a semejantes ropajes, me encontré con unos chicos bien majos que me dieron conversación. Eran pobres, pero, oyes, de todo tiene que haber. Se llamaban Nacho, Virginia, Belén, Tomás y Javi. Mira, hasta me fui con las chicas a probarnos la ropa al baño. Bueno, ellas, que yo tenía un poco de aprensión. Me sentí como cuando estaba en Sansueña y nos juntábamos todas a enseñarnos los trapitos. Claro, que no eran iguales, pero ya me entendéis. Fíjate, que al final lo pasé bien. Y hasta me tomé dos cervezas y acabé un poco piripi. Que no había bebido cerveza desde aquel día con los chicos de Jesuitas… Mejor no hablar, que luego dicen que en Sansueña la que no es p… lo sueña. Después de tanto ajetreo, me fui directa a casa. Hoy claro, el comentario de Pitusa. “Qué, graciosa, qué mona estás con tu Versace de segunda mano…”, me soltó la muy perra. “Ay, quita, quita, que al final me lo pensé. Me quedé en casa, que tenía que aclarar cuatro cosas con la doncella, que ya se sabe con estas ecuatorianas... Anda, anda, vamos a Escada que hay un modelito ‘de lux’ que no te puedes perder”. Pues a Escada que nos marchamos. Que otra cosica es.