NO VEO...
Por El Sastre
No sé qué hacer con Manu Jiménez y su amiga Moni. Desconozco los extremos a los que puede llegar. De momento sólo se me ocurre publicar su última aventura.
En esta ocasión os voy a hablar de un duro día de trabajo de Moni… Es una marica muy trabajadora, además de trabajar en el restaurante, también es imagen y relaciones públicas de las más prestigiosas y petardas fiestas de Madrid.
Moni había quedado con un amigo para ir a trabajar en una fiesta de OSOS, en un antro que presume de tener el cuarto oscuro más grande de Europa. Moni se encontraba levitando en mitad de la pista, estaba encantada con tanto roce, cachonda como una perra cuando su amiga la coge del brazo y se la lleva al cuarto oscuro: “¡Espero que tengas una buena razón para haberme apartado de esos osos que estaban a punto de taladrarme!”, dijo Moni con cara de Ana Obregón; la amiga sin mediar palabra sacó un gramo, lo cual le pareció una buenísima razón.
Nada más entrar en el cuarto oscuro y tras recorrer un infinito laberinto lleno de manos y rabos vio la luz y allí estaba una marica moderna metiéndole mano, si hay algo que Moni no soporta son las maricas modernas, al menos más que ella. “Perdona yo vengo a meterme una raya y nada más”, dijo Moni como excusa. La moderna se sintió ofendida y le dijo: “¿Ahora qué se lleva, ser estrecha?”. Eso a Moni le enfureció, así que esperó a que la moderna se metiera en el cuarto oscuro, le robó el bolso y se metió en una cabina. Cogió la cartera, una cámara de fotos, una game boy y varios cds y los dejó bien escondidos para llevárselos al irse.
Moni aprovechó una leve luz que se veía de fondo para ponerse debajo con su amiga a meterse una raya. "¡Amigaaa! Aquí hay goteras", dijo Moni asqueada. Miraron hacia la luz como si fuesen dos iluminadas. Allí estaba un oso en pompa encima de un podium con un puño metido hasta el reloj, como si de una marioneta se tratara. ¡¡¡DIOSSSS!!! Es lubricante corriendo por nuestras caras. Inmediatamente vomitaron las dos, se metieron unas rayas y se fueron corriendo al WC a limpiarse aquella mezcla asquerosa de lubricante y mierda. Moni ahora estaba en el servicio de la disco en pompa lavándose la cara, de repente nota como una infinidad de manos le soban todo el cuerpo. Moni pensó: “Aún se puede arreglar la noche”. Se hincó de rodillas y empezó a comer rabos como una descosida sin mirar a la cara a nadie hasta que miró para descubrir que se la estaba comiendo a su mejor amigo sin que él lo supiera. Estaba demasiado oscuro… Ahora sí me retiro. Cogió las cosas robadas y se fue a la sauna a ver si aún se podía solucionar la noche.
Axl Box llena de ideas frescas y contemporáneas ese universo lleno de grietas que es el collage.
Baila, marica moderna...
3 comentarios
agustin martin -
bueno ya se que no pega aqui, este coment, pero aqui te lo dejo si te parece bien.
www.quepues.es
Santo -
azzunena -